Uno de los efectos que tuvo la pandemia en el tejido empresarial es que aceleró su transformación digital. Dejó de ser una elección para ser una obligación y muchas compañías, sobre todo pymes, aún necesitan formación y asesoramiento para hacer frente a esta transición.
La Vanguardia
5 de Octubre de 2021
La crisis sanitaria de la covid-19 ha acelerado, sin duda, el proceso de digitalización de las empresas españolas entre tres y cinco años. Pero también de la sociedad: un 50% de los empleados trabajaron desde casa en los momentos más duros y el e-commerce aumentó más de un 20% en toda Europa. En este sentido, la pandemia puso en valor la transformación tecnológica de los negocios para ganar en competitividad y resiliencia y poder adaptarse a los nuevos tiempos, que los expertos aseguran que llegaron para quedarse.
Y es que la covid-19 forzó a las industrias a mirar desde otro prisma aspectos como las telecomunicaciones, la inteligencia artificial o el cloud. Para muchos desconocidos, y para otros un primer paso en su innovación estratégica.
Más allá de una global, y necesaria, alfabetización digital, las empresas que no quisieron quedarse atrás necesitaron durante el año pasado el asesoramiento de partners expertos en las tecnologías más innovadoras del mercado. Sobre todo, las pequeñas y medianas compañías españolas, las pymes. La realidad es que, actualmente, este proceso de digitalización y acompañamiento sigue siendo crucial para la supervivencia de muchas. Las consecuencias de un déficit tecnológico pueden ser devastadoras: acceso a los sistemas lentos, fallos de seguridad o un tráfico no fluido de datos.
Aplicaciones "cloud"
Gran parte de las pymes españolas no están preparadas para una transformación tan decisiva para su futuro. Es necesario digitalizar se no solo para ser competentes, sino mucho más eficientes y para poder mejorar su propio modelo de negocio. Conocedores de ello, Telefónica Tech –la compañía líder en transformación digital– cita un claro ejemplo. Migrar aplicaciones y servicios a la nube puede con vertirse en el gran aliado de las pymes para afrontar la subida de los precios de la luz, al permitir a las empresas pagar solo por el uso que hacen de los equipos. Un servicio tan sencillo puede permitir abaratar costes, y a su vez ser más eficiente en el uso de recursos.
Habitualmente, las pymes pagan por equipos grandes que realmente no necesitan. Lo hacen teniendo en previsión de picos de demanda; aunque, finalmente, el 90% del tiempo no los van a usar. En cambio, instalando un data center, las compañías pueden contar con un servicio fiable y preparado para estos picos específicos. Las pymes tendrán el mejor respaldo para responder a los problemas que puedan atravesar en los momentos más críticos. Es más, con tratar este servicio posibilita una descarga de funciones del equipo de TI de las empresas ya que las funciones quedan automatizadas.
Flexibilidad de pago
Otra de las ventajas del cloud es la flexibilidad de pago. Este servicio establece que las pymes solo pagan por el uso real que hacen de los equipos. Así, optimizan su consumo eléctrico y pagan menos por su factura de la luz. Siguiendo esta línea, un informe de Telefónica Tech asegura que los centros de datos actuales pueden ser hasta cuatro veces más eficientes en consumo que el pequeño data center que suele tener una pyme. Es decir, si las pequeñas empresas migran sus aplicaciones a la nube podrían ahorrar entre el 60 y el 70% de energía.
“Mientras que una pyme cuenta con equipos más antiguos para optimizar su in versión y los mantiene encendidos independientemente del uso que haga, los data centers disponen de hardware más eficiente, que consume menos recursos, y tecnologías de virtualización que aumentan el rendimiento de esos equipos”, argumenta Jaime Fernández, responsable de Infraestructuras de acens, parte de Telefónica Tech.
Consumos eficientes
60% ENERGIA: Las pymes puedes ahorrar un 60% de sus gastos de luz gracias a la nube
90% TIEMPO: Las pymes no usan, en un 90% de las ocasiones, sus grandes equipos.
10 KWH: El consumo de un servidor con dos procesadores ronda los 10 kWh al día.
84% EMISIONES: Las pymes que trabajan en la nube reducen en un un 84% sus emisiones de carbono.
Servidores eficientes
En este sentido, en 2013, un estudio de Lawrence Berkeley National Laboratory señalaba que migrar a la nube aplicaciones de negocio como el correo electrónico o el CRM podría reducir el consumo energético de estas aplicaciones hasta en un 87%. Más reciente aún, un análisis de Accenture del año 2020, a partir del análisis de la experiencia de migración a la nube de cientos de sus clientes, apuntaba que una pyme puede reducir su consumo energético en un 65% y las emisiones de carbono un 84%. Según la consultora, adoptar un enfoque centrado en la migración al cloud puede ayudar a reducir las emisiones mundiales de carbono, favorecer una mayor circularidad y fomentar productos o servicios más sostenibles. Según su estudio “La sostenibilidad del cloud”, dichas migraciones reducirían las emisiones de CO2 en 59 millones de toneladas anuales, lo que equivale a retirar 22 millones de coches de la circulación
La mejora tecnológica de los data center comporta una reformulación mucho más sostenible de los negocios. El tráfico de datos cloud no deja de aumentar –las cifras indican que se ha multiplicado por seis entre los años 2010 y 2018–, pero no lo hace de igual manera el consumo energético. Éste se mantiene y lo hace debido a los servidores de última generación, más eficientes y de menor consumo. El core de los data center actuales consume una cuarta parte de energía de la que necesitaba hace una década, y gracias a la virtualización, procesar y almacenar datos ahora cuesta hasta nueve veces menos.
El consumo de un servidor con dos procesadores, equipo habitual en una pyme, ronda los 10 kWh al día. Con un precio medio en 2021 de 0,25 €/kWh (casi el doble que en 2020) el coste eléctrico del servidor ronda los 75 euros al mes.
La mayoría de las pequeñas empresas no puede invertir en nuevos servidores, más modernos y con un menor consumo eléctrico. Por eso, es habitual entre estas compañías prolongar la vida útil de sus equipos al máximo, haciéndolos menos eficientes. Por el contrario, en la nube, la tecnología se renueva de forma constante. Esta adecuación permite que las pymes tengan a su disposición equipos más modernos y potentes, con mayor rendimiento y con menor consumo energético. La nube, por tanto, se trata de una herramienta indispensable a la hora de gestionar la información y poder crecer al ritmo que reclama la constante actualización tecnológica. Sea cual sea el tamaño de la empresa.